Una visita distinta a Salamanca: turismo de aventura y deporte
Lo habitual es que el turista se acerque a Salamanca para conocer su enorme patrimonio cultural. Pero en Salamanca hay muchas más posibilidades. Una de ellas es su extensa oferta de deporte y aventura.
Lo más relajante: piragüismo por el Tormes
El Tormes es navegable con piragua desde El Barco de Ávila (en la provincia homónima) hasta Alba de Tormes, ya en Salamanca. El recorrido, sin complicaciones, es de una gran belleza y permite al piragüista disfrutar del paisaje. Puede realizarse en una jornada y está disponible todo el año.
Se atraviesan las lagunas de Solana y Becedas, rodeadas de fresnos y robles; se sigue el transcurso del Tormes hasta el embalse de Santa Teresa; se pasa después por Alba de Tormes; y después hasta Capio Bernardo y Cilloruelo, poco antes de adentrarse en Salamanca.
Lo más variado: todos los deportes en Salas Bajas
Se trata de un complejo polideportivo al aire libre con todo lo necesario para mantenerse en forma. Consta de dos pistas polideportivas con suelo de resina sintética, cuatro pistas de tenis, campo de rugby, campo de fútbol, pistas de atletismo, un circuito de carrera continua y una exclusiva zona para practicar tiro con arco.
Lo más tranquilo: paseo fluvial en bici
A pesar de su nombre, el paseo fluvial en bicicleta no invita a zambullirse en el río montado en una, sino a recorrer su cauce en el carril habilitado a tal efecto. El paseo fluvial, recientemente ampliado, recorre la ribera en paralelo al río Tormes.
Lo más guerrero: batallas de ‘paintball’
En Salamanca podemos disfrutar de una batalla de pintura o paintball en el campo La Fortaleza o La Trinchera y en Torrecilla Paintball. En este último, tienen una parcela de más de 8 hectáreas con cuatro escenarios diferenciados: el speedball, la trinchera, la fortaleza y el frondoso bosque. En el campo La Fortaleza o La Trinchera, la oferta es parecida.